14.38
Navidad, horrible Navidad
El otro día encontré un viejo correo electrónico en el que hablaba (oh! sorpresa) bien sobre estas fechas. Tan bien hablaba que estuvo a punto de hacerme cambiar de opinión. Por desgracia, el tiempo, el destino, o, simplemente, la vida se ha encargado de ratificarme en mi sentimiento de aversión hacia la Navidad. Por lo menos hacia éstas. Sólo espero que acaben pronto, sin más sucesos dignos de mención. Demasiadas bajas, demasiado dolor, demasiadas lágrimas entre los que me rodean. El año está terminando realmente mal, me asusta cómo pueda empezar el siguiente.